Ésta tarde no tocaba escribir, el plan era dibujar plantillas de formas dos y tres dimensionales para que peque tropicultora se entretuviese replicándolas con palillos y bolitas de plastilina. Pero en uno de los pedidos de mangos esta semana, en la sección de notas del pedido, recibimos una sugerencia de ver Cowspiracy. He me aquí mordisqueando mango deshidratado y viendo un documental de vista obligatoria por todos nosotros. Cowspiracy.
Los problemas del mundo, y como los afrontamos.
O más bien, como salvamos nuestra existencia en él. Si me preguntaran hace una hora y media, cuales eran mis acciones personales como persona preocupada por el medio ambiente ( que de poco sirven, y de menos sirven habiendo visto cowspiracy), hubiera respondido: Ir en bici, utilizar energías renovables, limitar el consumo de bienes en general, evitar el uso de plásticos, ahorro en agua, agricultura orgánica, reciclaje, y racionalización en consumo de carne. En el último punto me adelanté 3 minutos a la conclusión del presentador de Cowspiracy, y me equivoqué estrepitosamente al suponer que puede ser suficiente. Bang, el pistoletazo de salida del documental.
Cowspiracy fue producido en el 2014 por Lonardo Dicaprio – sí el de la «no apta para diabéticos» Titanic – y es una invitación directa a abrazar una dieta vegana para salvarnos en esta tierra antes de que sea demasiado tarde. El documental está muy bien planteado, con un desarrollo coherente y lógico, y una estructura que nos lleva a entender los problemas de la industria ganadera, cárnica y de pesca. Nos hace ver que somos cómplices directos en su destrucción, y que de poco sirve un filtro para ahorrar agua y montarnos en bici cada día si nuestro plato de comida es la principal causa de la destrucción de nuestro entorno.
Cowspiracy, productos animales y sostenibilidad.
Era y soy consciente de que el consumo excesivo de carne acarreaba muchos problemas medioambientales. La mayor sorpresa que me reveló Cowspiracy es la magnitud del problema, y el impacto que tiene nuestra fuerte dependencia de los productos animales sobre los recursos naturales de la tierra. Esbozándose como el primer culpable de muchos problemas medioambientales:
- 51% de los gases de efecto invernadero.
- El consumo de la tercera parte de agua potable
- 45 % de tierra fértil, es dedicada a la ganadería. Teniendo en cuenta que la mayor parte de la producción de cereales se dedica a alimentar la ganadería.
- 91% de la destrucción de las amazonas.
- Mayor causa para extinción de especies.
- Principal causa de zonas muertas, tanto en tierra como en océanos. Por contaminación con nitrógeno de los excrementos de la industria.
No me ha dado tiempo contrastar los datos aportados por el documental, y soy consciente que algunos pueden ser debatibles. Pero queda patente que el problema es más grande de lo que cualquiera pueda imaginar, y hace que nuestros esfuerzos para ahorrar agua duchándonos rápidamente en lugar de darnos un baño sean irrisorios.
¿Y qué hacemos para salvar el mundo?
Después de ver el documental, tenía un dolor de estómago y una sensación de vértigo que podía conmigo. Cuando veo un trozo de carne me imagino los 15000 litros de agua gastados para traer un Kg de ella a los platos de los comensales. 15000 … sí, quince mil litros de agua.
Lo bueno en Cowspiracy es que te lo explica todo en gráficos. Había visto documentales con vistas aéreas de monocultivos bovinos en Estados Unidos. Lo consideraba una realidad lejana, de una cultura obsesionada por sus filetes. La cruda realidad es que no somos menos culpables que ellos.
Cowspiracy ve solamente un camino viable, ser veganos, y yo tengo unas ganas tremendas de llorar! No sé si es porque me encanta el Jamón ibérico o por un sentimiento de culpa, lo que tengo clarísimo es que me mantendré más firme en mi plan de ir reduciendo el consumo de carne paulatinamente. Mi anterior intento de hacerlo a golpe y porrazo terminó con un cocktail de fracaso y ansiedad importante.
Si descartas completamente ser vegetariano o vegano te pediría que reduzcas tu consumo de carne, a lo mejor un día, antes de que sea demasiado tarde ayudemos entre todos a dejarles un mejor legado a nuestros hijos. Empieza con un lunes sin carne, luego añade el miércoles y el viernes, al final a lo mejor volvemos al estofado del domingo…. o del mes.
Gracias por sugerirnos ver este documental y os invitamos también a verlo con nosotros.
https://www.youtube.com/watch?v=JyTFZefMvZ8
Otras página que aportan información sobro el impacto de la industria cárnica
Greenpeace: Cinco razones para reducir el consumo de carne.